11 ene 2013

Lo que no llega




No es ella, no soy tú.
No son las horas que me paso
Soñando que sueñas tú un poco conmigo.

Yo te quise, te quise y empecé haciéndolo
Cuando ni si quiera sabía
Que el cómo tú me miras
podía llegar a existir.

Te quise y te estoy dejando echar a perder,
Volví a acabar, ludópata, manca y coja
De poner más de una vez
Alguna extremidad al fuego.

Y se consumen, como los pocos besos
Que me quedan, tuyos, en el congelador.

Y te quise, como se quieren las causas perdidas,
Antes de saber que lo son.

Y te quise, como no se quiere
Lo que todavía no ha llegado a ser amor. 



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me recuerda a mi historia con la mujer a la que amo. Supongo que, en el fondo, todas las historias de (des)amor se parecen.

P.D.: Me debes un beso.

Facundo dijo...

lo que no llega tiene la fuckin costumbre de hacernos creer que algún día llegará. Y no lo sabemos realmente. Quizás para engañarnos o no hacernos tanto daño dejamos esa posibilidad abierta.

Anónimo dijo...

Parece que todo siempre se reduce a quedarse a vivir en un extremo..