
Estoy muy cansada de buscar mi camino. No está entre sus
piernas, pero tampoco entre las tuyas. Estoy muy cansada de buscar mi sentido.
Mi corazón aglomerado contra mis costillas, quiere escapar. Amar, dime, de qué
cojones sirve amar. A veces hacemos tantas cosas con la idea equivocada de que
el karma será justo con nosotros. La estúpida idea de que nos hemos ganado lo
que no merecemos ni tan si quiera un poco. La vida es muy larga, la muerte un
suspiro. Y viceversa. No podemos estar preocupándonos por algo tan banal como
es el amor. El amor es como el dinero, hace feliz a quiénes lo tienen y los que
no lo tienen, no lo necesitan. Amar sirve para que la gente te haga daño, sin
más, un puñetazo a la boca de tu realidad distorsionada, un tropiezo, una
explosión. Es complicarse la vida, hacértela cuesta arriba. Estoy cansada de
perder mis besos en carreras, en tiempo perdido que vuela entre nuestras
pestañas sin que podamos atarlo a nosotros.
Estoy cansada de sufrir y de no saber qué es lo que quiero
para mí, que es lo que merezco, qué es lo que tengo que ofrecer.
Fuerte. A veces no queda más que eso. Tú mismo y la fuerza
que le pongas a todo lo que hagas. Después de todo, las desgracias nunca vienen
solas y todos los abrazos guardan algún compromiso. Hasta los que das a la
almohada.
"Now it's back to the way we started. Strangers."
1 comentario:
Jo. Iba a comentarte algo sobre la importancia de amar y ser amado, sobre todo desde mi experiencia propia... Pero me ha quedado un sentimiento encontrado después de esta entrada, algo agridulce.
Publicar un comentario